Durante los pasados ocho años (y en camino a nueve), Tecnetico.com siempre se ha distinguido por producir contenido original.

Desde nuestro Sitio Útil de la Semanaâ„¢ (que por algo tiene el sí­mbolo de “trademark“) hasta Probando²™, nuestras propiedades son marcos para contenido producido de forma original y auténtica. No copiamos el contenido de otros sitios. Punto. Y cuando se ha utilizado material de otro sitio, se pide permiso y se da crédito. Esta ha sido la regla en Tecnetico.com desde el dí­a 1 y por eso nunca hemos sido señalados o cuestionados por nuestro contenido.

Produir contenido de esta forma no es barato.

Contrario a sitios que simplemente “copian y pegan” lo que otros producen, o toman el contenido originalmente publicando en un idioma y lo traducen a otro, los que como nosotros crean contenido original y realizan una redacción de calidad logran estos resultados invirtiendo tiempo.

Toma tiempo y destreza el, por ejemplo, recibir un comunicado de prensa o asistir a una conferencia de prensa y desmenuzarla, analizarla para entonces presentar la información a nuestra audiencia con nuestro estilo. Y ni hablemos de fotos, ví­deos, audio y demás formatos. Este proceso requiere de diversos tipos de recursos que cuestan dinero poder contar con ellos, pero tal vez lo más importante que se requiere es tiempo, y el tiempo es dinero.

Mira esta imagen:

Es una reproducción de una entrada el blog Movilnético realizada por nuestro colaborador Roberto Flores. De particular interés es el texto del mismo, producto de tiempo y esfuerzo en no tan sólo redactarlo, sino también conseguir las fotos que lo acompaña.

Ahora, por favor mira la imagen a continuación, captada de un sitio de internet ajeno a Tecnetico.com:

Tus ojos no te engañan. El texto es exactamente el mismo. Pero eso no es todo.

No sólo copió verbatim la entrada al blog de Roberto, sino que también eliminó el byline (nombre del autor) y copió nuestras imagenes. Y para colmo, las fotos publicadas en dicho sitio se alimentan directamente de nuestro servidor, como es evidenciado en esta imagen:

Esto es robo.

Sitios de internet que simplemente copian el trabajo de los demás (conocido con el sofisticado nombre de plagio), es robo. Así­ de sencillo, así­ de simple. Robo.

Las palabras que se usan, la gramática, cadencia, movimiento, dominio del idioma…en fin, el arte de la redacción o la “voz” del autor es lo que hace que un comunicado de prensa o una entrevista, expuesto ante varias personas de manera simultánea, puedas o no entenderlo. El autor y el estilo particular de la publicación donde su trabajo es expuesto es lo que hace la diferencia entre un artí­culo mediocre, difí­cil de entender y uno donde los conceptos y las ideas son expuestos de forma tal que el lector pueda entenderlo.

Pero cuando un artí­culo bien redactado es copiado por otros sin contemplación ninguna, sin dar crédito a quien lo publicó originalmente, y lo que es peor, sin autorización, ¡que no quede duda! Eso es robo. La acción de copiar el artí­culo sin tener el derecho es lo mismo que meterse a un banco y robar dinero, porque al copiar el contenido se está robando el tiempo que se invirtió en crearlo, y el tiempo es dinero.

No es la primera vez que nos roban contenido y/o nuestra propiedad intelectual.

Gracias a que contamos con las herramientas necesarias para detectar el robo de nuestra propiedad intelectual y a que tomamos acción todas las veces que lo hemos descubierto, hemos acumulado la experiencia y disciplina requerida para no solamente tomar acción, sino salir victoriosos en todas las ocasiones que hemos reclamado nuestros derechos.

Dos de los casos más recientes fueron en Facebook y Twitter, donde personas inescrupulosas y amigas de lo ajeno intentaron crear cuentas con el nombre de Tecnetico. No lo lograron gracias al apoyo de un experimentado equipo legal que nos asesora.

En cuanto al caso presentado en la foto al inicio de esta comunicación, HOY MISMO iniciaremos el proceso para notificarle al dueño del sitio su acción y solicitarle que de inmediato lo retire.

No nos ha temblado el pulso para denunciar y encausar a los ladrones de nuestro trabajo y definitivamente no nos temblará.

No importa si el sitio es visitado por uno o por un millón, actuaremos para defender nuestra propiedad.

Que no quede duda.