Como si fuese algo sacado de una pelí­cula de ciencia ficción las tropas de las fuerzas armadas de los Estados Unidos que están destacadas en los diferentes conflictos alrededor del mundo contarán en un futuro no muy lejano con un inusual material protector: lí­quido.

La armada de los Estados Unidos recientemente anunció el inicio de pruebas que conducirán al eventual uso en el campo de batalla de un innovador material que a simple vista luce como ropa ordinaria. Sin embargo una vez este recibe un impacto se transforma instantáneamente en una estructura similar a un enrejado que actúa como una fuerte armadura que protege al soldado de una posible herida. Y todo esto a una fracción del peso de equipo de protección ordinario.

LLamado “shear thickening fluid” (STF por sus siglas en inglés) este es un lí­quido hecho de sí­lica cuya creación es resultado de la investigación en el campo de la nanotecnologí­a. En condiciones de uso normal este mantiene su estado lí­quido. Al recibir algún impacto fuerte (una bala fragmentos de una bomba navaja u objeto punzante etc.) el lí­quido reacciona tornándose en un estado sólido que impide que el objeto peligroso penetre el lí­quido.

El lí­quido STF una creación de Cientí­ficos del Laboratorio de Investigación de la Armada de los Estados Unidos (ARL por sus siglas en inglés) y de la Universidad de Delaware se utilizará para crear uniformes que protejan al soldado de los peligros que comúnmente están asociados a la presencia en un campo de batalla.

Sin embargo el STF no es remedio seguro. “No podemos decir que el STF puede detener todas las balas pero ya estamos viendo cómo este provee una mejor protección por menos peso” dijo Eric Wetzel co-inventor del material y miembro del ARL.

Los cientí­ficos ya han creado un chaleco de prueba de peso ligero impregnado con STF. En pruebas tales como puñaladas tanto con cuchillos como con agujas hipodérmicas explosiones que arrojan fragmentos y balas de bajo calibre este resultó ser exitoso en proteger al portador de todos los ataques mencionados anteriormente.

Ahora los cientí­ficos están dirigiendo todos sus esfuerzos hacia el fortalecimiento del lí­quido para que ofrezca una protección eficaz contra balas de alto calibre y metralla producida por bombas colocadas en la carretera.

Las Armada de los EE.UU. espera poner en servicio los uniformes tratados con STF para el año 2010.